Dos modelos con diferente situación a rescatar. Uno todavía como práctica que se mantiene en el Mundo Indígena y otro todavía existente, pero minorizado, en el mundo rural vasco. Instituciones a rescatar para otros modelos de desarrollo.

Articulo tomado de

http://www.noticiasdealava.com/2016/09/09/ocio-y-cultura/comunicacion/auzolan-es-una-tradicion-que-se-ha-mantenido-en-areas-rurales-de-euskal-herria

INTERCULTURAL

La minga, institución indígena que se mantiene

El trabajo conjunto para conseguir obras y desarrollo fomenta la integración, la solidaridad y responsabilidad.

«Lo importante de la minga es que nada se recibe gratis, todo es en base a un esfuerzo comunitario”.

«A pesar de la tecnologización, la modernización y la globalización, esto (la minga) se mantiene, debilitada, pero se mantiene”.

«Las autoridades deberían pensar en la importancia de la minga y apoyar los procesos de autoafirmación cultural de los diferentes pueblos”.

 

Ariruma Kowii
Dirige el área de Letras de la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB)

 

 

 

Las comunidades indígenas del país mantienen el trabajo en minga para construir y conseguir obras que los beneficien y que, además, les permiten ahorrar tiempo y dinero.
Con la minga, un sistema de colaboración, solidaridad y responsabilidad, han logrado edificar caminos, sistemas de riego y distribución de agua a sus tierras, casas, iglesias, escuelas…
Esta institución, pilar del ayllu, una forma de comunidad familiar extensa originaria de la región andina con una descendencia común en la época del Tahuantinsuyo, buscó, a través de la organización social, conseguir beneficios para toda la comunidad.
Ariruma Kowii, un otavaleño que dirige el área de Letras de la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB), señala que la minga es una institución muy importante porque fomenta valores como la solidaridad, la corresponsabilidad, la disciplina y el compromiso, lo que permite a las familias beneficiarse de las obras planeadas.
En la comunidad y en la familia
Kowii cuenta que en la época del ayllu había dos instituciones que se manejaban para conseguir beneficios: la minga, de carácter público y comunitario para abrir caminos, regadío, construcciones para la administración del estado como para la religión…, y el ayni, una minga familiar y eventualmente de vecindad, para la construcción de una casa o preparar la tierra para sembrar, por ejemplo.
Estas prácticas se mantienen hasta la actualidad, aunque un poco debilitadas, pero con estas se ha permitido ahorrar tiempo y dinero a las comunidades, manifiesta el también escritor y poeta.
Asegura que los mingueros, que son familias enteras, ponen su mano de obra para la construcción, siguiendo siempre las especificaciones dadas por las autoridades, sin alterar las disposiciones, indica.
Responsabilidad compartida
En la minga se reparten responsabilidades por tarea: el trabajo a realizar, la comida, las bebidas refrescantes, la movilización y al final de la misma, la organización del huasipichai por la nueva obra. Todo requiere de colaboración y compromiso, asegura Ariruma Kowii.
Se asigna a cada familia el tramo que tiene que trabajar y el tiempo en que debe entregar si lo hace de forma individual, pero por lo general participan con la comunidad entera en días previamente establecidos.
“En la historia del país, la mayoría de las comunidades lograron tener caminos, agua, sistemas de riego, centros educativos… gracias a la minga, que es el esfuerzo de las propias comunidades que estuvieron abandonadas, más que por la distancia, por la ideología de exclusión y discriminación que ha caracterizado a la sociedad ecuatoriana y las autoridades”, expresó el docente indígena de la UASB. (CM)

 

 

Integración, lengua y gastronomía
“La minga es una filosofía de vida de las comunidades que ha permitido dar continuidad a las diferentes formas de expresión cultural”, expresa Ariruma Kowii, director del área de Letras de la Universidad Andina Simón Bolívar.
En una minga, dice, se dinamiza mucho la lengua, la gastronomía, las relaciones interpersonales. Durante el trabajo físico se conversa, se conoce a las personas durante la repartición de la chicha, una bebida elaborada con productos ligados a símbolos y herencias culturales.
Se intercambian ideas y se hace amistades a la hora de servir la ‘pambamesa’, un banquete de habas, mellocos, maíz, papas cocidas, carnes que se extiende sobre grandes telas blancas para que todos los mingueros se alimenten.
Es decir, que la minga fomenta mucho la comunicación, fortalece las relaciones interpersonales y consolida los niveles de relación que existen dentro de la comunidad, indica Kowii.

 

 

Justicia local
Si una o varias familias no participan en la minga, quedan relegadas de los beneficios, como el caso de los canales de riego, por ejemplo.
Ariruma Kowii señala que si esos grupos quieren acceder a la misma, buscan enmendarse y deben reponer el valor, después de que la comunidad cuantifica el esfuerzo hecho en la obra.
Pero también se les puede asignar otros trabajos que equiparen el esfuerzo realizado, indica.

 

 

 


 

 

Exige tus derechos

Español

 

CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA DEL ECUADOR


Capítulo segundo


Derechos del buen vivir


Sección segunda


Ambiente sano

Art. 14.- Se reconoce el derecho de la población a vivir en un ambiente sano y ecológicamente equilibrado, que garantice la sostenibilidad y el buen vivir, sumak kawsay.
Se declara de interés público la preservación del ambiente, la conservación de los ecosistemas, la biodiversidad y la integridad del patrimonio genético
del país, la prevención del daño ambiental y la recuperación de los espacios naturales degradados.

Art. 15.- El Estado promoverá, en el sector público y privado, el uso de tecnologías ambientalmente limpias y de energías alternativas no contaminantes y de bajo impacto. La soberanía energética no se alcanzará en detrimento de la soberanía alimentaria, ni afectará el derecho al agua.
Se prohíbe el desarrollo, producción, tenencia, comercialización, importación, transporte, almacenamiento y uso de armas químicas, biológicas y nucleares, de contaminantes orgánicos persistentes altamente tóxicos, agroquímicos internacionalmente prohibidos, y las tecnologías y agentes biológicos experimentales nocivos y organismos genéticamente modificados perjudiciales para la salud humana o que atenten contra la soberanía alimentaria o los ecosistemas, así como la introducción de residuos nucleares y desechos tóxicos al territorio nacional.

 

 

Kichwa

 

ECUADOR LLAKTAPAK MAMAKAMACHIY


ISHKAYNIKI WANKURIY


Sumak kawsaypak hayñikuna


ISHKAYNIKI PAKMA


Uksi kawsaypacha

14 niki.- Runakuna uksi pachapi kawsana hayñitami riksin, shinallatak mana pakishka kawsaypacha charinatami riksin. Pachamamata achka watapak charirayanata, sumak kawsayta charinatami charin.
Pachamama tukuykunapak munay kachun nishpa wakaychina kachun willan, shinallatak kawsaypacha llika, tawka sami kawsay, Mamallakta charishka tukuy rikchayta wakaychina nishpami willan, pachamama ama wakllirinatami willan; shinallatak urmachishka pachamama pakllakunata alliyachinatapashmi nin.

15 niki.- Mamallaktaka, tukuylla runapak kuskapi, shuklla runapak kuskapi, mana mapayachik ashatalla waktak, chuya sumak yachaykunatami ñawpachinka, mushuk mana mapayachik ushaykunatapash yachachinka. Awkik ushayka, alli mikuna awkikta wakllichinaman mana paktankachu, yakuta charina hayñitapash mana sakichinkachu.
Chakllichik, kawsay wañuchik, llipyak ayñita, unkuyta katichik, may miyuchik, shuktak llaktakunapi shitashka tarpuy chakllichikta mana mirachina, mana charinachu kan; kay llaktapi katunata, kanchaman katunata, apanata, kullkanata mana mirachinachu. Shinallatak unkuchik, wañuchik sumak yachaykunata, kawsay wañuyta yachana yankikta, runapak kawsay pantachikta, unku- chik mushuk ukuaychata mana charinachu. Awkikay mikuyta llakichik kallarikta, pachamamallikata llakichikta, paya llipyaayñita, ima shitashkakunatapash Mamallakta allpamanka mana yaykuchinachu.

Así lo recoge Jon Gazañazpi en esta entrevista sobre el Auzolan Vasco, http://www.noticiasdealava.com/2016/09/09/ocio-y-cultura/comunicacion/auzolan-es-una-tradicion-que-se-ha-mantenido-en-areas-rurales-de-euskal-herria

“Auzolan es una tradición que se ha mantenido en áreas rurales de Euskal Herria”

BILBAO Cuenta Ibon Gaztañazpi que en los núcleos rurales el trabajo comunitario ha sido y es una tradición muy antigua. Desde Euskal Telebista se ha querido recoger el testigo de esta forma de actuar y nace Auzolan. El presentador de ETB también será testigo este domingo del desenlace del remo en la Bandera de La Concha y el próximo de cómo termina la liga de este deporte que durante tres meses ha reunido a miles de aficionados ante el televisor. A lo largo de la entrevista también habla de la escasa visibilidad que tienen los deportes femeninos en los medios o del gusanillo que se le despierta como antiguo remero cuando ve las grandes pruebas; durante dos décadas bogó con la trainera de su pueblo, Orio.

¿Qué es ‘Auzolan’?

-Recuperar el trabajo comunal, una tradición en Euskal Herria. Hemos ido a cinco núcleos, no todos rurales, y en cada uno de ellos hemos realizado un trabajo de recuperación.

Supongo que también se han encontrado con muchas historias.

-Hemos grabado cinco programas y en cada uno de ellos siempre hay una historia que contar alrededor de la restauración o construcción. Pero la enjundia está también en las historias de la gente que participa en estos trabajos.

Dice que es una tradición, ¿de dónde viene?

-De muy atrás, de hace siglos. Es una tradición que se ha mantenido en áreas rurales de todos los Territorios. Puedes encontrar trabajos comunales en el norte de Nafarroa, en el Goierri guipuzcoano, Lea-Artibai, en Iparralde, en Araba… Son grupos de personas, sobre todo en áreas de baserris, que se unen para limpiar o arreglar carreteras, cercar los terrenos para el ganado, restaurar un edificio, repoblar un bosque de hayas que se ha quemado… Queda todavía mucho de esta forma de actuar.

¿Qué pretende el programa que comienza este domingo?

-Recuperar estas tradiciones y ponerlas en alza, enseñarlas también a los espectadores porque muchos desconocen cómo se hacían y cómo se hacen hoy en día.

¿Cómo surgió la idea de hacer este programa?

-Hay un formato muy parecido en Gran Bretaña, un presentador se va a un barrio y se dedica a restaurar casas. Pensamos que aquí se podía hacer algo de ese tipo a través de auzolan. Es la mezcla de dos ideas: de renovar y de los trabajos comunitarios.

¿Había participado usted en algún auzolan?

-Recuerdo cuando entraban los pescadores en Orio y había que recoger las redes y llevarlas a las campas para que las rederas las pudieran coser; las llevábamos nosotros, los chavales. En las hogueras de San Juan solíamos limpiar garajes, en las txarribodas se cortaba la hierba… Son recuerdos de la infancia.

Cambiamos el trabajo comunitario por las regatas.

-Ahí sigo, retransmitiendo las regatas desde junio. El domingo terminan las regatas de La Concha y la temporada acaba el 18 en Portugalete. Han sido tres meses de remo.

¿Cómo ha funcionado el remo en ETB?

-Muy bien, sorprendentemente bien. ETB sigue apostando por la regatas. Lo que estamos viendo es que la audiencia sigue creciendo y sigue acompañando. Euskal Telebista ha hecho una apuesta clara por las regatas y está teniendo una respuesta espectacular, estamos dando unos números de alucinar. El domingo pasado casi llegamos al 30% y seguimos en alza. Es un producto muy televisivo y la cadena lo está haciendo bien.

Mójese, ¿quién va a ganar la regata de La Concha?

-Ja, ja, ja… Está todo en el aire, La Concha y la liga, se la jugarán Hondarribia y Urdaibai, estas dos traineras están marcando una época. Llevan cuatro o cinco años convertidas en los gallos de pelea de la liga.

Veo que se queda en tablas, que no osa pronunciarse.

-No hago apuestas y, mucho menos, sin saber las calles, se sortean una hora y media antes de que comience la regata. Al final, se lo van a jugar como si fuera una tanda de penaltis en un partido de fútbol.

Esta edición las mujeres han entrado más fuertes en La Concha.

-Es la novena edición, ellas hacen su camino. Este año, por primera vez ha habido una segunda tanda, yo era un poco escéptico, pensaba que se iba a rebajar el nivel; pero salió todo de maravilla. El remo está teniendo también su camino en televisión, los datos que están dando las chicas en audiencia son muy buenos. Tiene su punto la regata femenina.

A los medios siempre se nos critica por dar poca cancha al deporte femenino. ¿Está de acuerdo?

-Probablemente tengan razón esas críticas. Pero también podríamos trasladar esa pregunta a otro tipo de deporte. ¿Cuánto se come el fútbol? El 85% o 90% de toda la información…

Ya, pero eso se juega en otro campo porque tampoco el fútbol femenino tiene repercusión.

-Hay deportes minoritarios que no aparecen en todo el año. Es verdad que los medios pasan un poco por encima del deporte femenino.

La única medalla de oro para Euskadi en Río la ha conseguido una mujer, Maialen Chorraut.

-Sí, pero de ella habla todo el mundo ahora, pero hasta que ha ganado esa medalla no se ha hablado tanto. Hay que ver cuánto sacrificio, cuánto trabajo y en los medios ha salido lo justo. Las chicas solo aparecen cuando despuntan a nivel internacional.

Usted ha sido remero de Orio, ¿no le pica el gusanillo cuando ve a los remeros en las regatas?

-Eso es mucho sacrificio, en remo se empieza a entrenar en noviembre. Tienen que estar diez meses al pie del cañón entrenando todos los días. Sí pica un poco, cuando ves en agosto cómo ondean las banderas. Creo que esa página ya la pasé y ahora estamos a otra cosa. Estuve veinte años remando en Orio y durante dos años fue entrenador de la Sotera en Santurtzi.